ntttttEntre los hijos de la Revolución solo uno permanece personificandou00a0el lado oscuro de la primera generación del u00abMéxico modernou00bb:u00a0Bernabé Jurado, auténtico Abogado del Diablo, corrupto y rapaz hasta el exceso, depravado y vicioso, fue capaz, sin embargo, de cobijarseu00a0entre los u00abpechos privilegiadosu00bb de la política y la sociedadu00a0en ascenso a lo largo del siglo XX. Marcado desde la infancia por elu00a0despojo de la hacienda familiar El Canutillo a manos de Pancho Villa,u00a0encontró un sitio al encarnar en sí mismo la auténtica leyenda negrau00a0del ejercicio del Derecho. Protagonizó los mejores eventos de las páginas de Sociales, perou00a0también los mayores escándalos que llenaron la Nota Roja: la exoneraciónu00a0de William S. Burroughs por el homicidio de su esposa; la sospecha de que era el asesino de Mercedes Cassola; ser el presuntou00a0organizador de u00abla fuga del siglou00bb al sustraer en helicóptero a unu00a0preso de la penitenciaría de Santa Martha Acatitla; engullir cínicamente, frente a las autoridades, las pruebas que inculpaban a susu00a0clientesu00a0Transa, marrullero y rey del soborno, la historia del Abogánster esu00a0una mirada a los entretelones del México posrevolucionario, que mucho tuvo de farsa y más de tragedia.ntttt
