"Resulta inquietante imaginar el tormentoso proceso creativo de un escritor que en vez de recibir su inspiración de las musas lo hace de las pérfidas Erinias, esas diosas de la mitología griega que representan a la furia y la venganza, hijas de la noche que castigan con ferocidad cualquier trasgresión. Y es que si hay un tono dominante en los relatos de Iván es el misterio femenino, la certeza de que algo siniestro y oscuro se oculta detrás de toda falda." rn