Nos alegramos sinceramente al tener en nuestras manos las primicias de la más reciente investigación de don Manuel Chávez Asencio. Jurista distinguido, Chávez Asencio nos ofrece con prosa clara y certera, en esta ocasión, una temática original y rica: Los convenios conyugales y familiares. Subyace, como es natural, en este quinto libro de tan respetado autor, la antropología filosófica que siempre ha profesado: El hombre íntegro, adherido sin tregua ni dubitación a la filosofía de la trascendencia, a la profesión del valor hondo e insustituible de la pareja, al entendimiento de la familia como baluarte sólido y toral de la sociedad que busca el bien común. A lo largo de más de un decenio, Chávez Asencio ha ejercido su cátedra en la Universidad Iberoamericana, siempre en torno a los valores que sostiene la filosofía tradicional hacia el hombre, la pareja, la familia, la vida. Otras labores sociales, además de las universitarias y las profesionales, han contribuido a hacer de don Manuel un humanista apasionado por la moral y el derecho. Fue presidente de los Colegios "Ignacio L. Vallarta" de la ciudad de México, desde 1961. Entre otras muchas funciones desempeñó también el autor de este libro la vicepresidencia de Asociaciones de Padres de Familia de Colegios Particulares, desde 1964. Desde esta perspectiva específica que ya ha caracterizado los sesudos estudios de don Manuel en materia de Familia, hoy, empero, nos muestra otra faceta de su personalidad: La agudeza y el ingenio de saber posar su ojo siempre atento sobre los contratos y conveníos que se producen alrededor del matrimonio. Nueva en verdad es esta perspectiva que acusa una riqueza hasta hoy insospechada. Como la copa frondosa de un árbol fecundo, el autor nos conduce por este caudaloso escenario, y ello constituye sin duda un mérito que lo ennoblece y lo distingue. No se piense que este libro cual ínsula no descubierta, resulta desconectado del Derecho de familia o del orden público. Al contrario, uno de sus más atinados resultados estriba sin duda en esa vinculación, en la relación que siempre se muestra entre el interés por preservar los valores familiares y la autonomía de la voluntad. Tanto a los estudiosos del Derecho de familia como a los juristas y moralistas que se ocupan del negocio jurídico, no les puede pasar desapercibida esta materia. Este libro instaura desde hoy un verdadero vaso comunicante entre esos ángulos visuales. A partir del concepto de Relación Jurídica y específicamente de la Relación Familiar, el autor nos lleva hacia los terrenos en Derecho de Familia, sus características, objeto y efectos jurídicos. Se estudia la autonomía de la voluntad a la luz del orden público e interés social en la materia. Se procede con limpio criterio al análisis de estos convenios del siguiente modo: Reguladores de las Relaciones Conyugales, Reguladores de las Relaciones Familiares, Regulador de Crisis Conyugal, Convenio en Divorcio Voluntario, Separación Conyugal y Convenios en Divorcio Contencioso. Termina este libro con el esquema de la nulidad en el Derecho de Familia. Ciertamente no resulta aplicable a este trabajo aquel dicho de que sólo al terminar de escribir un libro se aprende a hacerlo. La prosa es fluida, clara y transparente. Cada vez se aprecia cuán importante rescatar las raíces de la moral occidental para orientar al humanismo integral que exige la educación del siglo XXI, este libro contribuye con decisión a ese reto. Cuánto puede inspirar al terapeuta y también al trabajador social la enseñanza de León XIII: "La familia es una sociedad limitada en número, pero una verdadera sociedad anterior a toda nación o estado, con derechos y deberes propios...". Reclama por lo mismo la reflexión que derive de los capítulos del libro de Chávez Asencio, un esfuerzo por completar la Teoría de las Fuentes Formales del Derecho, en todo lo que atañe a las llamadas "convencionales" y que, en el orden de la familia, revisten sus propias y particulares peculiaridades. El autor logra, sin duda, una muy valiosa contribución a nuestra literatura jurídica, al coordinar y a veces enjuiciar la legislación al servicio de la dignidad humana, de la dignidad de la pareja y de la familia. Muy preciable mérito el de Chávez Asencio si se pondera lo que nos ofrece en este volumen para la perspectiva del apasionante resurgimiento del estudio y mística de los Derechos Humanos. Ciertamente conscientes de tan rica aportación, el lector, sea estudioso, jurista o estudiante de estas cuestiones, quedará seducido y, por qué no decirlo, asombrado de una temática, hasta hoy, prácticamente insospechada. Enhorabuena a la Editorial Porrúa, S. A. por interesarse en consolidar lo mejor de la producción jurídica. Subyace siempre en este estudio el interés jurídico por la protección y, hasta donde es posible, la subsistencia de la familia. Buen servicio hace nuestro admirado autor a la Doctrina Tradicional, al explicar el justo medio que puede conseguirse entre el carácter sagrado de la familia, tantas veces reiterado por la Doctrina Social Católica, especialmente a partir de las enseñanzas de León XIII y Pío XI, y los apremios y tribulaciones de parejas en crisis. Llama la atención de modo sobresaliente el espíritu conciliador con que el autor marca de modo indeleble su investigación. Bien escribía Carlo Goldoni al explicar las ansias humanas de inmortalidad: "El que deja una imagen suya en sus hijos, sólo muere a medias". Bienvenido un estudio que conjunta todas estas cualidades y otras más, que en obsequio a la brevedad de estas líneas no reseñamos ya, pero que el lector encontrará en las páginas plenas de buen sentido, de ciencia y de prudencia que componen este esperado y celebrado volumen. Dr. José de Jesús Ledesma 30 de Septiembre de 1991 Fiesta de San Jerónimo
